martes, 29 de junio de 2010
Te necesito en mis manos.Otra vez.
" Muchas veces me imagino que hay un montón de niños jugando en un campo de centeno. Miles de niños. Y están solos, quiero decir que no hay nadie mayor vigilándolos. Sólo yo. Estoy al borde
de un precipicio y mi trabajo consiste en evitar que los niños caigan en él. En cuanto empiezan a correr sin mirar a donde van, yo salgo de donde esté y los cojo. Eso es lo que me gustaría hacer todo el tiempo.
Vigilarlos. Yo sería el guardián entre el centeno. Te parecerá una tontería, pero es lo unico que de verdad me gustaria ahcer. Sé que es una locura. "
J.D. Salinger, El guardián entre el centeno.
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Me encanta este libro, me encanta el personaje, tal vez porque en una época tuvimos demasiado que ver. Espero más entradas, como siempre, mi prolífica bitácora. Muchos besos, porque ahora te los mandamos entre Cris y yo, y un abrazo fuerte, fuerte
ResponderEliminarPor cierto, no será esta una de esas indirectas con forma de flecha que me tiras a veces, ¿no? Porque todavía no me he dado por aludido... Si lo quieres me lo pides, aunque no sé dónde vamos a llevar todas las cosas que pides, jajajajaja. Hemos pensado en llevar un porteador... besos
ResponderEliminarEs, es...
ResponderEliminarEs una pedazo de flecha...bufff...asin asin de larga!!!!!!
jajjaajajjaja