sábado, 8 de octubre de 2011

A pocos kilómetros de Angkor Wat, cientos de niños son felices porque “mañana volverá a salir el Sol”.

A pocos kilómetros de los famosos templos de Angkor, cientos de chavales se ven forzados por sus padres a “jugar” entre toneladas de desechos. Allí, ellos caminan a pies desnudos sobre montañas de injusticia donde encontrar alimento es un regalo divino.

Temblando me quedo.