Dieciseís meses sin saber nada de Yoko.
Angustioso.
Me lo merezco?, tanto?, tanto tengo que pagar?.
Aún recuerdo su olor, si cierro los ojos y me concentro un poco, la huelo y la siento cómo si estuviera tumbadita a mi lado, cómo aveces solia dormirse.Su pelo suave, de ese color anaranjado que tanto me gustaba. Aún puedo recordar su tacto.
Cómo te echo de menos, mi pequeña.
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